Me llamo Luis Miguel Alonso y soy un terapeuta apasionado y preocupado por una salud que, al verla perder en las personas y limitar sus vidas, siempre me conmovió, convirtiendo este sentimiento en motivación y motor de mi estudio sobre la salud y la medicina. En pocas palabras, dedico mi vida y esfuerzo a ayudar a las personas que sufren, pues esa es mi verdadera vocación.
Hace unos años, sufrí un grave accidente de tráfico, que provocó que tardara más de un año en volver a caminar, haciéndome empatizar más aún con mis pacientes y su dolor. Y, dentro de esta lucha contra la enfermedad y la superación diaria, aprendí el valor de una correcta rehabilitación mental y física, descubriendo la verdadera capacidad que tiene el ser humano para la autocuración y regeneración de nuestro organismo.
También, aprendí el poder que producen las terapias naturales sobre nuestro organismo, activando nuestros sistemas de reparación, que llevamos dentro de nuestros cuerpos y que, durante miles de años, nos han permitido sobrevivir. Y, además, que con todo lo anterior se completa y se consigue el éxito en la lucha contra la enfermedad, teniendo fe en que vamos a mejorar, fe en uno mismo, y valentía y tesón para seguir adelante, pues lo veo cada día con mis pacientes y lo vivo en primera persona sobre mi salud.
Este aprendizaje forjó mi personalidad como terapeuta y me motivó más aún al estudio profundo y minucioso de las diferentes terapias y formas dentro de la medicina, que ayudan a la salud de mis pacientes. Y, actualmente, esa ayuda es mi trabajo y mi pasión.
Me llamo Luis Miguel Alonso y soy un terapeuta apasionado y preocupado por una salud que, al verla perder en las personas y limitar sus vidas, siempre me conmovió, convirtiendo este sentimiento en motivación y motor de mi estudio sobre la salud y la medicina. En pocas palabras, dedico mi vida y esfuerzo a ayudar a las personas que sufren, pues esa es mi verdadera vocación.
Hace unos años, sufrí un grave accidente de tráfico, que provocó que tardara más de un año en volver a caminar, haciéndome empatizar más aún con mis pacientes y su dolor. Y, dentro de esta lucha contra la enfermedad y la superación diaria, aprendí el valor de una correcta rehabilitación mental y física, descubriendo la verdadera capacidad que tiene el ser humano para la autocuración y regeneración de nuestro organismo.
También, aprendí el poder que producen las terapias naturales sobre nuestro organismo, activando nuestros sistemas de reparación, que llevamos dentro de nuestros cuerpos y que, durante miles de años, nos han permitido sobrevivir. Y, además, que con todo lo anterior se completa y se consigue el éxito en la lucha contra la enfermedad, teniendo fe en que vamos a mejorar, fe en uno mismo, y valentía y tesón para seguir adelante, pues lo veo cada día con mis pacientes y lo vivo en primera persona sobre mi salud.
Este aprendizaje forjó mi personalidad como terapeuta y me motivó más aún al estudio profundo y minucioso de las diferentes terapias y formas dentro de la medicina, que ayudan a la salud de mis pacientes. Y, actualmente, esa ayuda es mi trabajo y mi pasión.
Mi línea de trabajo
Si tuviera que definir mi estilo personal de trabajar, desarrollo en mi consulta una línea de trabajo para el tratamiento de mis pacientes basada en la integración de la osteopatía, con sus técnicas manuales usando la mano como principal herramienta; la fisioterapia, aprovechando las modernas innovaciones tecnológicas a las técnicas de tratamiento; la medicina tradicional china, aportando una perspectiva más global sobre el paciente complementando con el uso de plantas, la acupuntura, los remedios naturales, todo esto basado en la experiencia de milenios sanando pacientes; y, por supuesto, la nutrición clínica, adecuada y específica a cada paciente y su patologías, priorizando siempre la premisa de la «nutrición como forma de medicina». Y mi trabajo y esfuerzo es complementar todas estas formas de medicina entre sí, para dar el mejor abordaje posible a las enfermedades de mi paciente, siendo estas cuatro materias en las que me he formado profundamente.
Desde siempre, mi vocación fue la medicina, con el fin de ayudar al que sufre y, especialmente, me entusiasmaba el espacio comprendido entre la química de los fármacos y la cirugía como ultimo recurso, dadas mis experiencias pasadas como paciente, y descubrí que la especialidad médica, actualmente, se centra entre las pastillas y las intervenciones quirúrgicas y, desde ese momento, mi propósito fue convertirme en el mejor fisioterapeuta que pudiera y llevar la fisioterapia al máximo nivel y exprimirla, todo lo posible, para ayudar a todos los enfermos que pasaran por mis manos.
Curse los estudios de Universidad en la carrera de Fisioterapia, como una modalidad dentro de la medicina convencional y científica, y me especialicé realizando varios masters y postgrados sobre la misma, donde fui aumentando mis conocimientos y los fui combinando con la experiencia que iba adquiriendo de trabajar con pacientes en mi consulta desde el primer día. Así, pude observar su gran eficacia en muchos casos, pero también observé ciertas carencias y vacíos existentes en la medicina clásica ya que, en la mayoría de las ocasiones, protocoliza los tratamientos, tratando a todos los pacientes de una misma patología por igual, sin adaptarlos a las peculiaridades individuales de cada uno; y también que, en la actualidad, la medicina se centra únicamente en combatir la enfermedad y no la causa de la misma y, menos aún, en fortalecer el terreno donde se gesta esta enfermedad, previniendo de las mismas, en vez de tratarlas cuando ya es demasiado tarde y las única solución que nos queda son las pastillas o la cirugía.
Tras varios trabajando con pacientes reales y la experiencias que fui adquiriendo tratando numerosas patologías, pude notar el valor de complementar la medicina moderna basada en la evidencia científica, en ocasiones, basada más en conocimientos teóricos que prácticos (de ahí algunos fracasos de esta), aprovechando todos los beneficios y adelantos que nos ofrece la ciencia y complementándola con las diferentes medicinas alternativas empíricas, basadas en la experiencia de la humanidad que, durante milenios, han sanado pacientes por todos los rincones del mundo.
Buscando en todo momento la eficacia en el tratamiento de mis pacientes, hizo que mis esfuerzos y mi línea de trabajo haya sido integrar ambas medicinas, mediante el estudio profundo de las mismas, para extraer lo mejor de los dos mundos dentro de la medicina: la científica, basada en estudios científicos, y la empírica, basada en la experiencia clínica durante milenios.
Esto me motivó a estudiar profundamente las diferentes medicinas y recorrer medio mundo en busca de las terapias que buscan la salud de los pacientes desde perspectivas muy diferentes entre ellas para, de esta manera, complementar mi arsenal terapéutico y poder llegar a tener éxito en la mejora de la salud de mis pacientes en un espectro más amplio de enfermedades.
Curse la formación completa en medicina osteopática, durante 5 años, enseñándome que siempre hay que buscar el origen y tratar la causa de la enfermedad, conociendo todos los procesos de autoreparación y los medios para activar la regeneración de nuestro organismo.
Y me licencié en medicina tradicional oriental, durante 4 años, aprendiendo de primera mano en Seúl (Corea del Sur), donde todavía se desarrolla esta medicina en su forma mas original. El aprendizaje de esta medicina me otorgó la capacidad de diagnosticar e integrar la parte física, la bioquímica y la emocional de mis pacientes, integrándose las tres en un conjunto y, por otro lado, me dotó de sus potentes técnicas terapéuticas y sus remedios naturales milenarios.
En todo este proceso de aprendizaje, hasta la actualidad, he cursado numerosos postgrados universitarios sobre nutrición clínica, especializándome en la nutrición patológica relacionada con el sistema endocrino, metabólico, vascular e inmunológico de mis pacientes, convirtiéndose a lo largo de los años en mi mejor complemento, junto a mis terapias para combatir las dolencias de mis pacientes, como puede ser el caso de inflamación y dolor crónico, enfermedades metabólicas como la obesidad, diabetes o patologías autoinmunes como artritis, alergias e intolerancias.
Por tanto, mi trabajo se basa en el estudio personalizado y minucioso de cada paciente y cada caso, para combinar las diferentes técnicas de fisioterapia, osteopatía, nutrición clínica y medicina tradicional china, complementándolas entre sí para aportar la mayor eficacia a cada tratamiento.
Mi fin último, en definitiva, siempre es la recuperación y restauración de la salud de mis pacientes, de la forma más permanente.