Medicina Tradicional China

Esta ancestral medicina oriental se fundamenta en 4 principios básicos:

1. La prevención siempre es la mejor cura ante la enfermedad.
2. Concepto de nuestro organismo como ser global que integra la salud del cuerpo físico, bioenergética, bioquímica y emocional, en total armonía, y cualquier desequilibrio en estos favorece la aparición de la enfermedad.
3. Estamos totalmente conectados a la naturaleza y todos los cambios de naturaleza que nos rodea siempre se van a reflejar en nuestro organismo, tales como el cambio de estación, localización geográfica, climatología, nuestro hábitat, personas que nos rodean, alimentos, etc., teniendo una gran repercusión, tanto buena como mala, en nuestra salud, dependiendo de cada caso. Este fundamento nos hace conscientes sobre la sensibilidad de nuestro organismo al lugar donde habita y al medio que nos rodea.

Dónde radica su gran éxito

Parte del gran éxito de esta medicina oriental está en la individualización estricta y personalización del tratamiento a cada paciente, siempre después de un minucioso diagnóstico basado en una extensa valoración de la sintomatología del paciente ya que, recordemos, esta medicina milenaria no tenía a su disposición la tecnología actual (radiografías, laboratorios, etc.).

Por este motivo, los médicos que practicaban esta antigua medicina eran extremadamente hábiles en la observación sus pacientes y utilizaban un minucioso y exhaustivo diagnóstico, teniendo en cuenta toda la información que podían extraer sobres sus pacientes, como la forma de moverse, las características de la piel,  la lengua, los ojos, la voz, el estado emocional, etc., practicando una anamnesis e  interrogatorio médico exhaustivo, así como infinidad de muchos otros signos clínicos, para el perfecto diagnóstico y, de esta manera, aplicar el tratamiento por parte del médico y la prescripción de los hábitos de vida, nutrición y suplementación adecuados para la prevención de las enfermedades que acechan a los terrenos débiles del paciente, ya que la Medicina Tradicional China, además de tratar el problema de salud y enfermedades, se centraba, ante todo, en la prevención para fortalecer el terreno débil del organismo del paciente.

Reconocimiento de la Medicina Tradicional China

La Organización Mundial de la Salud (OMS) elaboró varios  tratados oficiales sobre la seguridad del tratamiento con acupuntura y su efectividad. Los datos de los estudios realizados por la OMS fueron recopilados  y proceden de multitud de países, como es el caso de China, Japón, EE.UU., Alemania, Corea, Inglaterra, etc, donde realizaron cientos de investigaciones y aplicaciones clínicas de acupuntura en múltiples patologías. Así, la OMS publicó un documento oficial con las enfermedades, que por su evolución y efectividad, eran recomendadas de tratarse con acupuntura.

En Estados Unidos, y en la mayoría de los países del continente asiático, como China, Corea o Japón, poseen en su oferta académica oficial la formación en medicina y acupuntura china, incluyendo en sus  programas de graduado, especialista y  doctorado universitario. Los requerimientos de admisión varían según la Universidad, siendo igualados a los cualquier otro título oficial universitario. En Europa, países como Francia incluyen el reconocimiento e integración de la medicina tradicional y acupuntura en el programa de salud francés.

La Medicina Tradicional China es el compendio de extensos conocimientos en medicina, en materia diagnostica y tratamiento de cientos de patologías diferentes y el uso una  herramientas terapéuticas propias, las cuales son la acupuntura (uso de la aguja), la dietética (uso de la correcta nutrición), el tuina (técnicas manuales y manipulaciones) y la famosa fitoterapia y farmacopea oriental (uso de remedios a base de plantas medicinales).